Has habitado tu casa o departamento por varios años; esas manchas en las paredes, las gotas de agua que se escapan de las regaderas o las rayaduras en tus puertas de madera son propias del paso del tiempo y del uso: nada grave. Sin embargo, a la hora de ponerla en el mercado inmobiliario, estos detalles marcan la diferencia entre venderla o no, y representan un porcentaje significativo en el precio de venta.

En ocasiones, se piensa que para vender nuestra propiedad debemos invertir grandes cantidades de dinero, haciendo incluso aquellas remodelaciones que no se concretaron durante nuestra estancia en ella.

Sin embargo, dejamos de lado que las personas que buscan una vivienda usada, están conscientes del factor tiempo y desgaste de la propiedad.

Eso no significa que estas imperfecciones serán bien recibidas por nuestros posibles compradores. La clave para vender nuestra propiedad a mejor precio, está justamente en los detalles:

 

Que nada se fugue

Asegúrate que todas los grifos o llaves de agua no tengan goteras y revisa que no haya fugas en las tuberías.

Acabados

Compra resanador para corregir los huecos en paredes y superficies de concreto que hayan dejado cuadros, cables o antiguas instalaciones. Haz lo mismo para las líneas desgastadas entre los azulejos de tu piso.

Entradas

Coloca nuevas manijas y/o cerraduras a las puertas tanto de entrada, como habitaciones y baños, no te olvides de usar aceite para que las puertas no rechinen.

Maderas

Si tienes puertas, estanterías y/o acabados de madera de buena calidad en tu casa, es muy probable que los compradores opten por conservarlos. Existen buenos productos en el mercado para el tratamiento de maderas que puedes utilizar para darles mejor aspecto. En caso de que tengan rayaduras más profundas, lija la superficie y después pasa el producto por ella.

Iluminación

Es preferible que no dejes los sockets sin foco ni focos fundidos. Cambia los interruptores en caso de que tengan una apariencia deslucida, así como las placas que los recubren.

Que todo camine

Arregla las puertas, canceles o estanterías corredizas, es fundamental que cuando tus compradores la visiten todas abran y cierren fácilmente.

Arreglo

Finalmente, nada presenta mejor un espacio como la pintura nueva. Invierte en pintar la fachada y los interiores de la vivienda con colores neutros, que además de dar una sensación de amplitud, hacen que los compradores puedan visualizar sus cosas dentro de la propiedad.

 

Estas pequeñas modificaciones poco costosas son estratégicas, pues podrás sacarle provecho y recuperar tu inversión. De acuerdo a los expertos, tomar en cuenta estos detalles y cambiarlos, puede incrementar el valor de la vivienda hasta en un 5%.

Y a ti, ¿Qué otro detalle consideras importante como comprador y como vendedor? Comparte con nosotros tu opinión.